Han puesto como plazo el 1 de julio para introducir estos cambios en las etiquetas de la DGT, que se consensuarán con el sector y los ayuntamientos.
Pero no será drástico. El director general de Tráfico, Pere Navarro, ha dicho durante una entrevista recogida por Europa Press que se plantea la opción de hacer alguna modificación para subsanar ciertas «disfunciones».
Las etiquetas actuales seguirán teniendo validez.
La fecha tope para consensuar estos cambios, que recogerán novedades y defectos de forma, será el 1 de julio, tal y como estableció el Gobierno Central en 2020 en el plan de impulso a la automoción.
Podría afectar a los mild-hybrid, que son calificados como híbridos cuando en realidad el motor eléctrico que acompaña al térmico no mueve las ruedas, como sí ocurre con los híbridos o los híbridos enchufables.
De igual manera, también podrían ser revisados los híbridos enchufables (PHEV), ya que la gran mayoría son tratados como cero emisiones, cuando en realidad no lo son.
En este escenario, los microhíbridos o mild-hybrid (de 24 o 48 V) podrían dejar de ser ECO, y algunos PHEV -los de autonomía eléctrica superior a 40 km- podrían perder la etiqueta CERO, si los cambios fueran drásticos.
Lo más seguro es que se introduzcan nuevos distintivos y que la nueva norma afecte a vehículos nuevos.
Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) se ha denunciado en varias ocasiones que muchos de los nuevos microhíbridos o mild-hybrid con etiqueta ECO contaminan más que vehículos de diésel y gasolina que disponen de etiqueta C.»
Las ciudades más afectadas por estos cambios son Madrid y Barcelona, que cuentan respectivamente con Madrid Central -ahora anulado jurídicamente- y la Zona de Bajas Emisiones de Barcelona.